20
Sáb, Abr

Infertilidad femenina

Typography

La infertilidad femenina es la incapacidad de concebir o llevar un embarazo a término debido a uno o más problemas específicos de la mujer, como ovulación irregular, ovario poliquístico y anormalidades del área pélvica, entre otras. De todos modos, los distintos casos pueden ser tratados con posibilidad de éxito.

Es importante entender que infertilidad no es lo mismo que esterilidad, debido a que en el primer caso la concepción y el triunfo del embarazo son posibles. De la misma manera, la infecundidad secundaria, que es la incapacidad de una pareja de concebir después de haber logrado uno o más embarazos, también puede resolverse.

Los diversos casos nombrados, serán brevemente explicados para que tengas una idea de por qué conducen a que no se logre la gestación.

La ovulación irregular es la falta de liberación o la liberación esporádica de un óvulo sin fecundar. La infertilidad por factor femenino, incluida la secundaria, puede ser causa de este tipo de ovulación.

Los cambios hormonales, a menudo, son también razón de estos problemas de ovulación, sin embargo, cualquier serie de factores puede contribuir a este trastorno, entre otros, menopausia prematura, síndrome de ovario poliquístico (una afección causada por el exceso de la hormona luteinizante), quimioterapia, tumores, infecciones, ejercicio físico o dietas excesivas e hiperprolactinemia (producción excesiva de prolactina).

Existen diversos tipos de ecuaciones menstruales anormales que pueden indicar la existencia de una ovulación irregular como la amenorrea primaria (falta de un primer ciclo menstrual); la amenorrea secundaria (no menstruar después del primer período); la polimenorrea (más de un ciclo menstrual dentro de 26 días), y la hipomenorrea (reducción importante en la duración y el volumen de los menstruos).

Como el útero debe poder aceptar la implantación del embrión y alimentar al feto durante los nueve meses, cuando dicho órgano está en condiciones anormales puede no concretarse el embarazo y esa anomalía puede darse por fibromas uterinos, paredes del endometrio inadecuadas, endometriosis o defectos de nacimiento.

Las alteraciones del área pélvica pueden ser otra causa de infertilidad, que incluyen problemas anatómicos en la vagina o el cuello del útero, enfermedad y obstrucción de las trompas de Falopio, endometriosis y adhesiones y daños en la cavidad pélvica.

El moco cervical hostil es otra causa de este problema, aunque la importancia de su hostilidad aún es debatida por los especialistas en fertilidad.

En un ciclo normal, el cuello del útero produce un moco acuoso justo antes de la ovulación, que ayuda a que los espermatozoides lleguen a las trompas de Falopio y fecunden el óvulo, pero si es demasiado espeso o viscoso, puede evitar que el esperma pase por el cuello del útero. También puede ocurrir que contenga anticuerpos. Así mismo, puede causar infertilidad secundaria.

El tema es para tomarlo en serio, pero no hay que temer, si no, por el contrario estar atentas a los diversos puntos expuestos. Por el momento, a prestar atención y recurrir al médico.