Y un dia nos va a tocar volver y vamos a tener que empezar a prepararnos, sacarnos el pijama o joggin, reencontrarnos con el peine y la planchita, volver a abrir el estuche de maquillaje, y cambiar las pantuflas por un calzado mas decente, pero por sobre todo, vamos a tener que ponerle actitud a esta nueva forma de vivir.
Antes de hacerlo, revisemos un poco nuestros nuevos hábitos de aislamiento:
1- Descansar las horas correspondientes: Durante la cuarentena, por aburrimiento o por placer quizas hayamos alterado nuestras horas de descanso. Hay que revisar si nos sirve o debemos replantearla.
2- Comer liviano: Cocinar y comer es una hermosa forma de agasajarnos y compartir, pero las recetas de panadería, pastelería y postres, deben disminuir para que nuestro cuerpo se sienta más liviano y no se canse cuando vuelva a moverse.
3- Cuidado de piel: Encerradas en casa, no hay smog, pero cuando comencemos a viajar y salir, nuestra piel estará expuesta nuevamente a los agentes externos. El cuidado y rutina de limpieza, no se toma descanso.
4- Outfits: Momento de la verdad. La ropa que usábamos para hacer nuestras diligencias o ir a nuestros trabajos, nos debe entrar, de lo contrario hay que evaluar comprar online el talle que necesitamos.
5- Agendá las actividades positivas: Si tenés que llevar una agenda, no marques solo las responsabilidades y obligaciones, sino también aquellas actividades que nos daban placer y hoy, más que nunca, nos van a reencontrar.
6- Arrancá tu día sin celular: No hace falta abrir los ojos y mirar el celular. Este hábito nos llena de stress. Podemos despertarnos, estirarnos, sin el celular en la mano.
7- Da las gracias: No dejes de agradecer cada día, y cada momento que nos toca vivir. Sea bueno o malo, es solo un punto de vista, cada experiencia nos regala un aprendizaje.
8- Vestite de actitud: No olvides llevar la actitud positiva donde quieras que vayas. pase lo que pase, la actitud va a quedarte bien con lo que te pongas, además de ayudarte a afrontar la nueva normalidad a la que nos tendremos que habituar.