18
Sáb, Ene

¿Cómo cuidar las várices en el verano?

Typography

Las várices no sólo son un problema estético, sino también una condición de salud que requiere atención, más aún en verano porque con el calor causan mayores molestias. Es por ello que la Dra. Natalia Alejandra Miloz, (MN 122.923 // MP452.503) Cirujana Vascular y Flebóloga de DIM CENTROS DE SALUD, explica cómo cuidarlas y ofrece, además, una guía de ejercicios para aliviar los síntomas y tips para mejorar la circulación.

 

 Las várices, son venas dilatadas y tortuosas que se forman debido a una acumulación de sangre, generalmente en las extremidades inferiores. Esto ocurre cuando las válvulas de las venas, encargadas de impulsar la sangre hacia el corazón, no funcionan correctamente, lo que provoca su acumulación y genera hinchazón.

Factores como la predisposición genética, el sedentarismo, la obesidad, los embarazos y permanecer de pie o sentado por largos períodos contribuyen a su desarrollo. Además, el calor del verano puede dilatar las venas, aumentando la sensación de pesadez, dolor, edemas y calambres.

Adoptar un estilo de vida saludable es fundamental para prevenir la aparición de várices. Una dieta balanceada rica en fibra, mantener un peso adecuado y evitar el sedentarismo son pilares esenciales. Además, la consulta temprana con un especialista en flebología puede prevenir complicaciones como flebitis o úlceras venosas.

Para mejorar la circulación durante esta época debemos mantener un peso corporal saludable, consumir una dieta equilibrada con frutas, verduras, fibras y sin exceso de sal, hidratarse correctamente con al menos 2.5 litros de agua por día y a la piel  con cremas con vitamina A, evitar la exposición al sol en horas pico y al hacerlo usar siempre protector solar, no estar muchas horas parada o sentada (si no cada hora realizar una pequeña caminata para activar el retorno venoso), realizar actividad física al menos 30-40 minutos diarios como caminata, bicicleta, natación.