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Sáb, Ene

Los cuidados del pelo y la piel en las vacaciones

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La deshidratación y los daños por la exposición solar o el contacto con el agua salada y la pileta son las consecuencias que sufren el pelo y la piel en el verano, razón por la cual es prioridad realizar cuidados previos para evitar esos desgastes.

 

 

Natura, la marca de cosmética por catálogo elegida mundialmente por millones de mujeres, presenta 4 consejos para esta temporada:

 

-La protección solar es fundamental en cualquier rutina de cuidado y debe realizarse todo el año porque los protectores solares también previenen el envejecimiento prematuro de la barrera cutánea. Es importante elegir el adecuado para las necesidades de la piel y aplicarlo de manera constante.


-El sol y las temperaturas altas durante mucho tiempo resecan la piel y pueden generar incomodidad por el exceso de oleosidad. Para evitar ello, son ideales los productos que ofrecen una hidratación profunda pero ligera, capaz de absorberse rápidamente sin dejar sensación pegajosa; tanto en rostro como en cuerpo.
Usar productos con texturas refrescantes, como cremas que se pueden almacenar en la heladera para un efecto de frescura, puede transformar la rutina diaria en un momento revitalizante. La aplicación regular de hidratantes previene la sequedad y contribuye a una piel más suave y firme durante toda la temporada.

 

-Como hemos dicho, no sólo el sol agrede el cabello, también el agua salada y el cloro hacen que pierda hidratación, dejándolo quebradizo y con frizz. Para combatir esto, es fundamental utilizar productos formulados para tal fin como los que son de reparación y blindaje para cabellos expuestos al sol que pueden ser en  spray protector UV, una máscara restauradora y un shampoo revitalizante.


-El maquillaje no puede quedar fuera del cuidado porque, como el calor y la humedad provocan que nuestra piel se vuelva un tanto oleosa, es necesario encontrar looks especiales para el verano. Se recomienda el uso de bases ligeras, correctores de alta cobertura y polvos matificantes: todos, grandes aliados para controlar el brillo sin dejar una sensación pesada en el rostro. Y para completar, las fragancias con notas frescas y florales se convierten en el toque perfecto, aportando un aroma delicado sin perder frescura ni intensidad. 

 

Siempre hay que tener en claro cuáles son las necesidades específicas de cada piel y cada cabello porque pasan por distintos estados frente a la exposición a factores internos y externos. Éstos incluyen la edad, el ambiente (seco o húmedo), la región del cuerpo (áreas más o menos resecas) y las temperaturas. Una vez que se tenga claro esto recién ahí es cuando hay que conseguir los productos adecuados para el tratamiento.