El renacer del menta nos impulsa de vuelta a la estética retro pero reinventada. Vintage mint tiene un modo que trata la delicadeza retro con un guiño pop, su makeup retoma elementos icónicos de los años 60, 80 y 90, miradas pop, sombras pastel, piel luminosa y los traslada a una versión fresca, minimalista y moderna. Es un guiño a la inocencia mod, con la rebeldía suave de las nuevas generaciones.
El verde menta se convierte en el nuevo statement color: delicado, inesperado y sofisticado. Desde pasarelas hasta editoriales y redes sociales, este color pisa fuerte como protagonista absoluto o detalle disruptivo.
Esta tendencia se adopta como símbolo de libertad creativa: un tono que rompe con lo neutro, sin dejar de ser elegante. Ideal para beauty lovers, maquilladores y consumidores que buscan salir del clásico nude sin caer en colores extremos. El color menta tiene personalidad, pero mantiene una elegancia discreta que lo hace ultra usable y versátil.
Tips y trucos
La estética retro se reinventa con frescura en el Vintage Mint Makeup, donde el verde menta se convierte en protagonista absoluto. Este look combina piel luminosa, labios nude y una mirada que juega entre lo gráfico y lo suave, siempre con el foco en el tono menta.
Desde sombras satinadas hasta delineados flotantes, esta tendencia fusiona nostalgia y modernidad con una elegancia inesperada. Los focos clave del look van a ser: ojos menta con sombra difusa o delineado gráfico.
Para la piel, vamos a buscar una piel glowy, super natural, fresca y sin exceso de polvo.
Labios suaves en tono nude rosado o gloss, lo importante es que no compitan con los ojos.
Las cejas van a ser muy definidas, pero soft, sin que se vean como bloque y un toque perlado en pómulos o en el lagrimal, para un efecto de luz vintage.
Un estilo retro con ejecución moderna, ideal para looks frescos, editoriales, o contenido digital con aire nostálgico.